En este artículo vamos a abordar el tema de Cheiichnus desde diferentes perspectivas, con el objetivo de ofrecer una visión completa y enriquecedora sobre el mismo. A lo largo del texto exploraremos las múltiples facetas que Cheiichnus presenta, analizando su impacto en diferentes ámbitos y su relevancia en la actualidad. Con un enfoque crítico y reflexivo, nos adentraremos en los diferentes aspectos que rodean a Cheiichnus, proporcionando al lector una comprensión profunda y detallada sobre el tema. A través de investigaciones, análisis y testimonios, buscaremos arrojar luz sobre Cheiichnus y ofrecer una perspectiva informada que fomente el debate y la reflexión.
Cheiichnus Jensen & Bergström, 2000 es un paragénero de icnofósiles con una única icnoespecie, Cheiichnus gothicus Jensen & Bergström, 2000, descrita a partir de un yacimiento del Cámbrico Inferior en la Formación Haidar de Västergötland (Suecia).
Las trazas de Cheiichnus se presentan como estructuras en epirelieve de galerías verticales cilíndricas a elípticas de alrededor de 10 milímetros de profundidad con el fondo cóncavo más o menos semiesférico. Este fondo redondeado tiene, en el ejemplar tipo del género, 30 milímetros de anchura y 34 de longutud y posee en su región central una depresión de poca profundidad y acanaladuras de disposición levemente radial poco aparentes. Tanto la galería como la base presentan numerosas marcas similares a arañazos o rayaduras en un patrón aparentemente aleatorio.
Cheiichnus guarda ciertas similitudes con el icnofósil Bergaueria y Conostichus, especialmente cuando su conservación es mala, aunque este no presenta ornamentación y en él aparecen constricciones trasversales. También se asemeja a Rusophycus, especialmente en cuanto a los patrones de rayaduras que presenta, si bien no tiene la característica morfología bilobulada de éste y es más profundo. Ambos icnofósiles son considerados trazas de descanso tipo domichnia en fondos marinos no consolidados, Bergaueria de anémonas y Rusophycus de trilobites. Así Cheiichnus ha sido también interpretado como galerías poco profundas realizadas por trilobites o trilobitomorfos. Con las dimensiones que presentan estas trazas el animal que las realizó quedaría completamente enterrado en el sedimento por lo que suele descartarse que corresponda a galerías de depredación tipo praedichnia a favor de galerías de descanso o morada tipo domichnia.