En el artículo que presentamos a continuación abordaremos el tema de Egeria (mitología), el cual ha sido objeto de interés y debate en diversas esferas de la sociedad. Desde sus orígenes hasta su relevancia en la actualidad, Egeria (mitología) ha sido objeto de múltiples interpretaciones y opiniones, lo que ha generado un amplio campo de estudio e investigación. A lo largo de este artículo, exploraremos los diferentes aspectos que rodean a Egeria (mitología), analizando su impacto en diversos contextos y ofreciendo una visión integral de su importancia en el mundo actual.
Egeria («del álamo negro») era, en la mitología romana, una de las Camenas, ninfa del séquito de Venus, habitaba en la fuente o manantial de Porta Capena en Roma; era protectora de las novias como futuras madres así como también de los partos. Se casó con Numa Pompilio, «el piadoso», segundo rey de Roma y le enseñó asuntos relacionados con ser un rey justo y sabio, inspirándole la legislación religiosa, enseñándole plegarias y conjuros eficaces.
Cuando murió Numa Pompilio, Egeria lo transformó en un pozo, situado en el bosque de Ariccia, cuyas aguas gemían al igual que ella al fallecer su esposo, consagrado a Diana, en el Lacio. Por sus lágrimas constantes, ella misma se convirtió en fuente.
En Roma se rendía culto a Numa en la Porta Capena.