En el presente artículo queremos profundizar en el tema de Jikininki, que ha despertado un gran interés en múltiples sectores de la sociedad. Jikininki ha cobrado relevancia en los últimos años debido a su impacto significativo en diferentes ámbitos, desde la salud hasta la tecnología. A lo largo de estas líneas, analizaremos los aspectos más relevantes relacionados con Jikininki, explorando su importancia, su evolución a lo largo del tiempo y las perspectivas futuras que se vislumbran en torno a este tema. Desde sus orígenes hasta su relevancia actual, Jikininki ha demostrado ser un punto de inflexión que marca un antes y un después en numerosas áreas, motivando debates, investigaciones y cambios significativos.
En el budismo japonés, los jikininki (食人鬼 fantasmas comedores de hombres?) son los espíritus de los humanos avariciosos, egoístas o impíos que son malditos después de la muerte para buscar y comer cadáveres humanos. Llevan a cabo tales actos durante la noche, en la procura de cuerpos muertos recientes y ofrendas de comida dejadas para los muertos. Algunas veces, también saquean los cuerpos que comen para encontrar objetos de valor que usan para sobornar a oficiales locales a cambio de que los dejen en paz.
Salen a merodear por las noches para profanar las tumbas y alimentarse de cadáveres. Son zombis, es decir muertos vivos.
A menudo se dice que los jikininki se parecen a cadáveres en descomposición, quizás con algunas marcas no humanas como garras afiladas u ojos brillantes. Son una terrible visión, y cualquier humano que vea uno quedará congelado por el miedo. De cualquier manera, bastantes historias les dan la habilidad de disfrazarse mágicamente como un ser humano normal e incluso de llevar "vidas" normales durante el día.
Los jikininki son pretas de la vigesimosegunda clase en el budismo japonés. También son considerados a veces como una forma de rákshasa o gaki (‘fantasmas hambrientos’). En el último caso, pueden ser liberados de su existencia deplorable a través de recordatorios y ofrendas (segaki).
Jikininki también es el título de una película dirigida por Ted Geoghegan.