Kokugaku

Kokugaku (Kyūjitai: 國學 Shinjitai: 国学; lit. Estudio nacional de japanología) fue una corriente intelectual que rechazaba el estudio de los textos budistas y chinos y favorecía la investigación filolófica de los clásicos japoneses. La palabra 'Kokugaku' se ha traducido como “Estudios nativos” y fue una respuesta al Neoconfucianismo sinocéntrico. Rechaza el estoicismo del confucianismo y valora la cultura japonesa anterior al confucianismo.

Los kokugaku, partiendo de la literatura antigua japonesa y del sintoísmo, abogan por el retorno a una supuesta edad dorada de la cultura y sociedad japonesas. Recurren a la poesía japonesa antigua empleando el auge del feudalismo (a mediados del siglo XII) y otros logros culturales para mostrar la “emoción” de Japón.

Historia

Lo que acabaría conociéndose como tradición kokugaku, comenzaría en los siglos XVII y XVIII como kogaku (“estudios antiguos”), wagaku (“estudios japoneses”) o inishie manabi, un término introducido por Motoori Norinaga y su escuela. Los kokugaku, partiendo de la literatura antigua japonesa y del sintoísmo, abogan por el retorno a una supuesta edad dorada de la cultura y sociedad japonesas. Recurren a la poesía japonesa antigua empleando el auge del feudalismo (a mediados del siglo XII) y otros logros culturales para mostrar la “emoción” de Japón.

Eventualmente, los pensadores partidarios del Kokugaku acabarían por ganar poder e influencia en la sociedad Japonesa, y serían la influencia primordial para la filosofía y el movimiento Sonnō jōi. Esta corriente política, junto con otros factores, acabarían llevando al colapso del shogunato Tokugawa en 1868 y la consiguiente restauración Meiji. Además, el sintoísmo estatal (国家神道 Kokka Shintō) y el socialismo de estado, desarrollados a partir del pensamiento kokugaku, influenciaron indirectamente la política japonesa, llevándola a una expansión imperialista a partir de los últimos años del siglo XIX y principios y mediados del siglo XX.

Principios teóricos

Según David Margarey Earl, el Kokugaku mantenía que el carácter nacional japonés era puro en esencia, y solo podría revelarse en su máximo esplendor una vez que las influencias extranjeras (chinas) fueran expulsadas. Para este movimiento, el "Alma china" era muy diferente del "Alma verdadero" o "Alma Japonesa". Este verdadero espíritu japonés necesitaba ser revelado mediante la negación de miles de años de aprendizaje negativo chino.

Principales pensadores

Véase también

Referencias

  1. Earl, David Margarey, Emperor and Nation in Japan, Political Thinkers of the Tokugawa Period, University of Washington Press, 1964, pp. 67

Enlaces externos