La tabla periódica de los elementos es una herramienta esencial para los químicos, tanto estudiantes como profesionales. Fue desarrollada a lo largo de muchos años por varios científicos y hoy en día es un icono de la ciencia. En este artículo, vamos a discutir la historia de la tabla periódica, cómo se organiza, sus elementos y cómo se usa en la química moderna.
La tabla periódica es una representación visual de los elementos que existen en nuestro universo. Los elementos se organizan en función de su número atómico, electrones y propiedades químicas. La tabla se divide en filas horizontales (conocidas como períodos) y columnas verticales (conocidas como grupos o familias).
Los elementos en la misma fila horizontal tienen el mismo número de niveles de energía y, por lo tanto, comparten algunas propiedades químicas. Hay siete filas horizontales en la tabla periódica, y cada una tiene un número creciente de elementos más pesados. El primer período comienza con el hidrógeno y el helio y los elementos en el séptimo período son los más pesados, con sus electrones más externos ubicados en un nivel de energía que puede alojar hasta 32 electrones.
Las columnas verticales contienen elementos con propiedades químicas similares. Hay dieciocho grupos de elementos en la tabla periódica y cada grupo se designa con un número y una letra. Por ejemplo, el grupo 1 se llama Grupo IA y el grupo 18 se llama Grupo VIIIA. Los grupos se utilizan para clasificar elementos con propiedades químicas similares. Un ejemplo de esto es el Grupo IA, que contiene los metales alcalinos como el sodio y el potasio. Estos elementos tienen una valencia de +1 y reaccionan violentamente con el agua.
La tabla periódica se ha desarrollado a lo largo de muchos años. En 1869, el químico ruso Dmitri Mendeleev publicó la primera versión de la tabla periódica. La versión de Mendeleev fue basada en propiedades químicas y la ordenó en función del número atómico. Sin embargo, la tabla periódica de Mendeleev no incluía a todos los elementos conocidos en ese momento.
George Julius Stoney fue el primero en proponer la existencia de los electrones en 1874. Luego, en la década de 1910, el físico inglés Henry Moseley descubrió que el número de protones en el núcleo del átomo (el número atómico) determinaba el lugar del elemento en la tabla periódica. Este descubrimiento llevó a la reorganización de la tabla periódica en función del número atómico y no en función del peso atómico.
Los metales son elementos que se caracterizan por tener una alta conductividad térmica y eléctrica, brillo y maleabilidad. Se ubican en la parte izquierda de la tabla periódica. La mayoría de los metales son sólidos a temperatura ambiente, exceptuando el mercurio, que es líquido. Los metales se dividen en dos categorías de acuerdo a su reactividad: los metales alcalinos y los metales alcalinotérreos.
Los no metales son elementos que tienen baja conductividad térmica y eléctrica, son opacos y generalmente son quebradizos. Se encuentran en la parte superior de la tabla periódica. Los no metales se ubican en la parte superior derecha de la tabla periódica.
La tabla periódica es una herramienta vital para cualquier químico. En general, se utiliza para predecir cómo los elementos reaccionan entre sí y cómo los compuestos se formarán a partir de estos elementos. Los metales alcalinos, por ejemplo, son útiles en la síntesis de productos químicos y medicamentos, mientras que los metales de transición se usan en la fabricación de acero y otros metales. Los gases nobles se utilizan en lámparas y dispositivos de iluminación.
La tabla periódica es esencial para la química moderna. Fue desarrollada a lo largo de muchos años y es una herramienta fundamental para predecir cómo los elementos reaccionan entre sí y cómo los compuestos se formarán a partir de estos elementos. La tabla contiene siete filas horizontales (períodos) y 18 columnas verticales (grupos) que ayudan a clasificar los elementos en función de su número atómico, electrones y propiedades químicas. Esta herramienta es fundamental para los químicos, estudiantes y profesionales, para comprender la estructura de la materia a su nivel más básico.