Diplomática (ciencia)

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La diplomática tiene por objetivo el estudio de los diplomas, es decir, «la descripción y explicación de los tipos, formas tradición y elaboración de las actas escritas»,​ cualquiera que sea su autor, teniendo en cuenta sus caracteres extrínsecos e intrínsecos, es decir, el soporte, la escritura, el lenguaje, el formulismo y los demás elementos integrantes para formar juicio de su autenticidad e interpretarlos de acuerdo con una convención establecida, en una época y contexto cultural específicos. Al especialista en la materia se le conoce como diplomatista.

El nombre se tomó del primer libro en la materia, De re Diplomatica, de Jean Mabillon, publicado en París en 1681. Fue un estudioso benedictino quien empleó este término en su guía para la utilización de documentos oficiales como pruebas, lo cual era un recurso novedoso para la época. En la actualidad, la diplomática es una ciencia auxiliar de la historia.

Una de las ramas propias es la diplomática pontificia, que estudia los documentos pontificios.

Definiciones

El Diccionario Webster (1828) define la diplomática como la "ciencia de los diplomas, o de los escritos antiguos, documentos literarios y públicos, cartas, decretos, estatutos, codicilos, etc., que tiene por objeto descifrar escritos antiguos, averiguar su autenticidad, su fecha, firmas, etc."​.

Giorgio Cencetti (1908-1970) definió la disciplina como "el estudio del Wesen y del Werden de la documentación, el análisis de la génesis, constitución interna y transmisión de los documentos, y de su relación con los hechos representados en ellos y con sus creadores".

La Commission International de Diplomatique ha definido la diplomática como "la ciencia que estudia la tradición, la forma y la emisión de los documentos escritos".

De forma más pragmática, Peter Beal define la diplomática como "la ciencia o el estudio de documentos y registros, incluyendo sus formas, lenguaje, escritura y significado. Implica el conocimiento de cuestiones tales como la redacción y los procedimientos establecidos de determinados tipos de documentos, el descifrado de la escritura y el análisis y la autenticación de documentos".

Theo Kölzer define la diplomática como "la enseñanza y el estudio de los fueros".​ Trata los términos "carta", "diploma" y "documento" como sinónimos en sentido amplio, y se refiere a la definición de "documentos" del erudito alemán Harry Bresslau como "declaraciones escritas registradas de acuerdo con ciertas formas que se alternan según la diferencia de persona, lugar, tiempo y asunto, y que están destinadas a servir como testimonio de procedimientos de naturaleza legal".

En sentido estricto, y tal como la entienden habitualmente los estudiosos actuales, la diplomática se ocupa esencialmente del análisis y la interpretación de los elementos lingüísticos y textuales de un documento. Sin embargo, está estrechamente asociada a varias disciplinas paralelas, como la paleografía, la sigilografía, la codicología y los estudios de procedencia, todas ellas relacionadas con las características físicas y la historia de un documento, y que a menudo se llevan a cabo conjuntamente con un análisis diplomático. Por lo tanto, el término diplomática se utiliza a veces en un sentido ligeramente más amplio, para abarcar algunas de estas otras áreas (como ocurría en la obra original de Mabillon, y como queda implícito en las definiciones de Webster y Beal citadas anteriormente). El reciente desarrollo de la ciencia en la Europa no anglosajona está ampliando su alcance a una historia cultural de la documentación que incluye aspectos de alfabetización pragmática o comunicación simbólica.

Christopher Brooke, un distinguido profesor de diplomacia, se refirió a la reputación de la disciplina en 1970 como la de "una ciencia formidable y lúgubre... una especie de juego al que juegan unos pocos eruditos, la mayoría de ellos medievalistas, inofensivo mientras no domine u oscurezca la investigación histórica; o, quizás, lo más común de todo, una ayuda para la comprensión de considerable utilidad para eruditos y estudiantes de investigación si tan sólo tuvieran tiempo libre de ocupaciones más serias".

Historia de la diplomática

De re diplomatica..., Mabillon.

Los hombres de Estado fueron los primeros que dieron a conocer documentos de interés histórico, y fueron quienes lograron penetrar en los archivos señoriales y en los de las antiguas abadías. A partir del siglo XVII comienzan a darse a conocer documentos públicos y privados que pertenecieron a la Edad Media, útiles a la historia para suplir la ausencia de crónicas e historiadores de la época. Era imprescindible verificar la veracidad de los documentos reveladores. En los archivos señoriales y monásticos había gran número de documentos falsos.

Con anterioridad al siglo XVII, la diplomática no se consideraba como una verdadera ciencia, desde siempre las autoridades han dictado reglas para distinguir los documentos auténticos de los falsos.

En 1672, el jesuita Daniel Papenbroeck publicó su obra, en la cual denunciaba la falsedad de muchos documentos de la época merovingia, principalmente los de la célebre abadía de san Dionisio de París. En 1681, el P. Jean Mabillon refutó las afirmaciones de Papenbroeck en De re Diplomatica y sentaba los principios de la diplomática. El propio Papenbroeck acabó por retractarse.

Durante más de cincuenta años, la obra de Mabillon fue considerada como el referente más completo en la materia. Se mantuvo una guerra diplomática entre las congregaciones de los jesuitas y la de los benedictinos que finalizó con una obra titulada El Nouveau traité de Diplomatique, que se utilizó en toda Europa.

Períodos

En la diplomática apostólica se distinguen cuatro períodos.

Cancillerías

Caracteres extrínsecos y caracteres intrínsecos

Debemos diferenciar los aspectos técnicos y metodológicos que nos llevan a determinar si el documento es verdadero (heurística) de la interpretación acerca de la veracidad de su contenido (hermenéutica). Es decir, un documento puede ser verdadero aunque no diga la verdad. Los documentos tienen dos tipos de caracteres: extrínsecos e intrínsecos.

Caracteres extrínsecos: Estos son la materia escritoria, la forma de documento, los instrumentos gráficos, las tintas, las letras, las abreviaturas, signaturas y rúbricas y los sellos. El documento puede ser papiro, pergamino o papel. La forma del documento puede ser: volumen o rollo, hoja suelta o página y cuaderno o libro. Generalmente el papiro se guardó en rollos; el pergamino en rollos o en hojas sueltas y el papel en cuaderno o libro. Los instrumentos utilizados para escribir varían desde el pincel, la pluma, el cáñamo, el punzón, etc. La tinta puede fabricarse sobre la base de tierras de colores, pueden ser negras, rojas, púrpuras, doradas y plateadas.

Caracteres intrínsecos: Se pueden definir tres partes en un documento:

Finalidad

La diplomática al estudiar los documentos, en cierto modo, los critica, es decir, no solamente equivale a juzgar su autenticidad o falsedad, sino también a conocer su valor en vista de los caracteres intrínsecos y extrínsecos que ofrece. Esta crítica, si ha de ser completa, abarca tres funciones:

Ejemplo de análisis diplomático: una donación de Hugues Capet en 989

Transcripción y estado físico

La escritura (número de referencia "Archives nationales de France" AE/II/84) está escrita en pergamino (696 x 320 mm) y su escritura en carolina tardía sobre diez líneas marca una división clásica en litterae elongatae (l.1, 9 y 10) y litterae communes (l.2-8), una tradición documentada desde al menos la Antigüedad Tardía.

IN NOMINE SANCTAE ET INDIVIDUȨ TRINITATIS, HUGO, GRATIA DEI REX. QUICQUID LOCIS DIVINO CULTU MANCIPATIS LARGIENDO CONFERIMUS, PROFUTURUM NOBIS AD AETERNAM BEATITUDINEM OPTINENDAM ET AD PRESENTEM VITAM FELICIUS transigendam omnino confidimus. Itaque noverit omnium sanctae Dei aecclesie fidelium nostrorumque presentium ac futurorum industria, quia pro absolutione peccatorum nostrorum, ad deprecationem venerabilis abbatis monasterii Fossatensis, nomine Maioli, et monachorum ejusdem congregationis, quod est dicatum in honore beatȩ virginis Mariae ac principis apostolorum Petri, considerantes eorum non modicas necessitates, propter hoc complacuit celsitudini nostrae, in quadam villa, in comitatu Parisiacensi sita, cui est vocabulum Mansiones, mansum indominicatum, cum pratis et terris arabilibus cultis et incultis, et farinariis, pascuis, aquis aquarumve decursibus, cum mancipiis utriusque sexus desuper commanentibus, sive cum omnibus apendiciis suis, videlicet aecclesias duas, quarum una est mater aecclesia sita in honore beati Remigii, et alia capella in honore sancti Germani, et omnem vicariam in ea potestate habendam, praedicto abbati vel fratribus traderae atque delegare. Unde etiam hoc altitudinis nostrae preceptum fieri, predictoque abbati vel congregationi dari jussimus, per quod memoratas res omnes, ad supradicti monasterii fratrumque subsidium juste legaliterque pertinentibus omniumque rerum summa integritate, tradimus ac delegamus ut secundum eorum dispositionem successorumque suorum administrationem per futura tempora ordinentur, eisque pro sua oportunitate utantur, nostrum memoriale conjugisque meae seu filii nostri Rotberti regis ac consortis regni nostri aeternaliter fundendo pro nobis preces inibi habeatur. Et ut hȩc auctoritatis nostrȩ largitio nostris futurisque temporibus diligentius conservetur, atque ab ipsis fratribus securius possideatur, manu propria subter eam firmavimus anulique nostri inpressione insigniri jussimus. RAGENALDUS CANCELLARIUS SCRIPSIT. SIGNUM HUGONI  GLORIOSISSIMI REGIS. Anno II regnante Hugono rege . Data mense XII kalendas julii, indictione II. Acta publice Parisica urbe.

Las diferentes partes del discurso diplomático

Véase también

Referencias

  1. Martínez de Sousa et al., 1989, p. 234
  2. Webster's Dictionary (1828); citado en Oxford English Dictionary (2ª ed.)
  3. Cencetti, Giorgio (1985). «La Preparazione dell'Archivista». En Giuffrida, Romualdo, ed. Antologia di Scritti Archivistici. Roma: Archivi di Stato. p. 285. . Traducción de Duranti 1989, p. 7.
  4. Cárcel Ortí, Maria Milagros, ed. (1997). Vocabulaire Internationale de Diplomatique (2nd edición). Valencia: Collecció Oberta. p. 21. Archivado desde el original el 6 de diciembre de 2016. Consultado el 27 de noviembre de 2013. «La Diplomática es la ciencia que estudia la tradición, la forma y la elaboración de los actos escritos.» 
  5. Beal, Peter (2008). org/details/dictionaryofengl0000beal Un diccionario de terminología inglesa sobre manuscritos, 1450-2000. Oxford: Oxford University Press. p. 121. ISBN 978-0-19-926544-2. (requiere registro). 
  6. Kölzer, Theo (2010). «Diplomatics». En Classen, Albrecht, ed. Handbook of Medieval Studies: Terms - methods - trends 1. Berlin: De Gruyter. pp. 405-424 (405). ISBN 9783110184099
  7. Bresslau, Harry (1969). Handbuch der Urkundenlehre für Deutschland und Italien 1 (4th edición). Berlin: De Gruyter. p. 1. 
  8. Brooke, Christopher N. L. (1970). «La enseñanza de la Diplomática». Journal of the Society of Archivists 4: 1-9. doi:10.1080/00379817009513930
  9. {Article|langue=en|auteur1=Carl-Richard Brühl|titre=Diplomatique comparée des royaumes barbares. |Periódico=École pratique des hautes études. 4e section, Sciences historiques et philologiques|date=1977|lire en ligne=https://www.persee.fr/doc/ephe_0000-0001_1976_num_1_1_6279%7Cpages=507-537}}

Bibliografía